¡Hoy por fin, llegó la primavera! En realidad ya hace varios días que el sol nos acompaña y da gusto poder pasear por palma en manga corta y gafitas de sol. La primavera ha llegado para quedarse y yo más feliz que una perdiz. Días perfectos para montar en bici por el Coll, ir en patines por el Paseo Marítimo, tomarse un batido de fresa en alguna terracilla y pasear por la playa en buena compañía. El mundo parece más bonito en primavera y la gente más feliz y más buena. (¡¡Y parece que Cupido y la Primavera son muy buenos amigos!!) Atrás quedan esos domingos de lluvia y frío y decimos "hola, qué tal" a nuestras barbacoas en casas de campo y días de picnic en Lluc.
Y por supuesto lo mejor de la primavera es.... ¡¡¡¡que la sangre altera!!!! Y cómo me gusta eso a mí... jaja Época de parejitas que probablemente no llegarán al verano, vestidos de florecillas que en invierno al mirar las fotos pensaremos "qué cutre, ¿y yo cómo pude ponerme eso?", gafas de sol más grandes que nuestras caras que nos quedan mal, pero es que están de moda... jaja Como dicen Los Delinqüentes: "Primavera trompetera ya llegó, me despido del abrigo".
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